Orígenes, Fundador y Expansión Mundial
El Jûdô es un arte marcial moderno y deporte de combate que tiene sus raíces en Japón. Su historia se remonta al siglo XIX y ha experimentado una evolución significativa a lo largo del tiempo, convirtiéndose en una disciplina ampliamente practicada y reconocida en todo el mundo.
Orígenes y Desarrollo:
El Jûdô fue fundado por Jigoro Kano en Japón en 1.882. Kano nació en 1.860 y fue un estudioso y practicante apasionado de diversas artes marciales tradicionales japonesas, como el Jû Jutsu. Al ser testigo de la violencia y la decadencia de algunos estilos de Jû Jutsu, Kano se propuso desarrollar un sistema más seguro y efectivo que promoviera el autodesarrollo y la educación física y mental.
Fundador y Fundación:
Jigoro Kano fundó la primera escuela de Jûdô, llamada Kôdôkan, en Tôkyô en 1.882. La palabra “Kôdôkan – 講道館” se compone de los caracteres japoneses “Kô” (que significa “antiguo”), “Dô” (que significa “camino” o “vía”), y “Kan” (que se traduce como “lugar” o “institución”). El Kôdôkan se convirtió en el epicentro de la enseñanza y promoción del Jûdô, y sigue siendo una institución importante para la práctica y enseñanza de esta disciplina en la actualidad.
Expansión a Todo el Mundo:
El Jûdô se expandió rápidamente más allá de las fronteras de Japón gracias a los esfuerzos de Jigoro Kano y sus discípulos. Kano viajó extensamente por el mundo, dando demostraciones y enseñando su arte marcial en diferentes países. Durante la era Meiji, el Jûdô se enseñó en la Academia Militar de West Point en Estados Unidos y en la Universidad de Cambridge en el Reino Unido, lo que contribuyó a su reconocimiento y popularidad en occidente.
Competencias y Reglamentación:
Las competiciones de Jûdô juegan un papel importante en el desarrollo y difusión de esta disciplina. En el Jûdô moderno, los combates tienen lugar en un tatami (superficie de lona acolchada) y se dividen en diferentes categorías de peso y edad. Los competidores intentan proyectar al oponente al suelo mediante técnicas de derribo y controlarlos con inmovilizaciones o sumisiones. El Jûdô en los Juegos Olímpicos se realiza desde la edición de Tôkyô 1.964, aunque en la siguiente edición (México 1.968) estuvo ausente del programa oficial. Hasta Seúl 1.988 solo participaban hombres; es a partir de Barcelona 1.992 cuando se disputan también competiciones en las categorías femeninas.
Uniformes y Grados:
Los practicantes de Jûdô utilizan un uniforme conocido como “jûdôgi” o “gi”. El jûdôgi se compone de una chaqueta gruesa y pantalones anchos, generalmente de color blanco o azul. Los cinturones, llamados “obi”, se utilizan para indicar el nivel de experiencia y grado del practicante. Los colores de los cinturones varían desde el blanco para los principiantes hasta el cinturón negro, que representa un alto nivel de dominio y experiencia.
Otros Detalles de Importancia:
El Jûdô no solo se enfoca en la técnica y la competencia, sino también en el desarrollo del carácter y la autodisciplina. Los principios del Jûdô, como el respeto, la cortesía, el esfuerzo máximo y la amistad, son fundamentales para el crecimiento personal de los jûdôkas.